Todos esperan con emoción a que suene la campana anunciando el recreo. Cada minuto es un tesoro, una posibilidad para vivir una aventura, explorar la jungla o conquistar una montaña. En el recreo hay peleas, pero también reconciliaciones y declaraciones de amor; es donde se comparten los abrazos, los triunfos, las preguntas y el lunch. En los poemas de El recreo se encuentran las historias que suceden en el patio escolar durante ese momento del día tan anhelado.